Gertrudis Gómez de Avellaneda

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¿Quién fue Gertrudis Gómez de Avellaneda?

Gertrudis Gómez de Avellaneda, también conocida como «La Avellaneda», «Tula» o con el seudónimo «La Peregrina», fue una poeta, dramaturga y traductora cubana–española del siglo XIX. Nació el 23 de marzo de 1814 en Puerto Príncipe, Cuba, con el nombre de María Gertrudis de los Dolores Gómez de Avellaneda y Artega o Arteaga se mudó pronto a España, país donde se hizo famosa con sus obras y donde murió el 1 de febrero de 1873. Es autora de obras tan importantes como la novela Sab (1841).

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Vida y obra de Gertrudis Gómez de Avellaneda

Nacida en Puerto Príncipe, Cuba, el 23 de marzo de 1814, Gertrudis Gómez de Avellaneda era hija de Francisca de Arteaga y Betan-court y del oficial de marina Manuel de Avellaneda. Desde muy temprano «Tula», como la apodaron, mostró signos de genio literario. Leía mucho y a los 12 años ya escribía poesía, teatro y novelas. Mientras tanto, su padre murió en 1823 y la madre de Tula se volvió a casar rápidamente con Isidoro de Escalada.

“La mujer busca antes de todo el corazón; quiere admirar sin ser deslumbrada; quiere ser dominada sin tiranía; quiere y necesita ser amada.”“La sociedad, sobre todo en las ciudades civilizadas y corrompidas, es la cloaca en que se vierten todas las inmundicias del corazón humano.”

Gertrudis Gómez de Avellaneda

Hermosa y talentosa, Tula soñaba con visitar Andalucía, la tierra natal de su padre. En 1836, la familia se embarcó a Europa, y Tula y su hermano Manuel se fueron a Sevilla. Allí publicó poesía bajo el seudónimo de «La Peregrina». También recibió y rechazó a varios pretendientes. Sin embargo, en 1838 conoció y se enamoró apasionadamente de Ignacio de Cepeda, quien a veces la alentó en sus afectos pero finalmente la rechazó. La frustración de Tula evocó una serie de cartas de amor a Cepeda y fue la base de gran parte de su producción literaria desde 1838 hasta 1845.

La Avellaneda se trasladó a Madrid en 1840, donde se estableció rápidamente entre la élite literaria de España. El año siguiente vio la publicación de su primer volumen de poesía, Poesías, y su primera novela, Sab que es considerada como la primera novela esclavista, incluso antes de La cabaña del tío Tom Harriet Beecher Stowe, que fue publicada nueve años después.

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Gertrudis Gómez de Avellaneda

Tula escribió mucho. Varias obras de teatro, entre ellas Munio Alfonso y El Príncipe de Viana, se abrieron a recepciones entusiastas. Mientras tanto, su vida personal era turbulenta e incluso escandalosa. En 1844 tuvo una aventura con el poeta Gabriel García Tassara y un año después dio a luz a una hija ilegítima, Brenhilde. García Tassara rechazó al niño, que sólo vivió nueve meses, y Tula pronto empezó a escribir Cepeda de nuevo.

Se casó con Pedro Sabater en 1846 a pesar de que éste estaba enfermo de cáncer de laringe y murió cuatro meses después. Tula se refugió en un convento de Burdeos, pero pronto salió para reanudar su carrera. Su pluma fue tan prolífica como siempre: en 1852 cinco de sus obras se estrenaron en Madrid, y otras dos al año siguiente. En 1853, solicitó ser miembro de la Real Academia Española, pero fue rechazada. Los miembros de la Academia reconocieron su mérito literario pero decidieron que la membresía debía restringirse a los hombres.

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En 1855, La Avellaneda se casó de nuevo. Su segundo marido fue el Coronel Domingo Verdugo y Massieu, un político liberal. Dada su estatura política y la amistad de Tula con Isabel II, su boda tuvo lugar en el Palacio Real de Madrid el 26 de abril de 1855. Verdugo recibió una grave pero no mortal herida en un intento de asesinato en 1858 durante el estreno de una obra de su esposa. Su nombramiento como gobernador general de Cuba le dio a Tula la oportunidad de regresar a su isla natal. Los cubanos saludaron su regreso con suntuosas recepciones y gran fanfarria. Verdugo murió en 1863, y Tula dejó Cuba al año siguiente, visitando los EE.UU., Gran Bretaña y Francia a su regreso a España. Vivió hasta 1873, cuando las complicaciones de la diabetes le costaron la vida.

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Estilo y legado

Gertrudis Gómez de Avellaneda alcanzó un reconocimiento duradero entre los críticos literarios españoles como poeta lírica. Sus obras, aunque no alcanzaron la talla del mayor drama español, están a la altura de cualquier otro escrito en el siglo XIX. Las novelas y las obras de prosa más cortas de Tula le dan fama como una de las principales figuras literarias españolas de cualquier género durante el siglo XIX.

«La mayor virtud no compensa el defecto…»

Gertrudis Gómez de Avellaneda

Su obra abarca tanto la poesía como la novela y el teatro, pero era especialmente conocido por su poesía. Sus versos se caracterizan por la audacia métrica y el gusto por los coloridos epítetos. No son obras acabadas y pulidas, sino fruto de un alma romántica y apasionada, lo que les da un impulso vital que les da interés. Su obra narrativa destaca: Guatimozín, último emperador de México (1946) y El cacique de Turmequé (1860). Su obra dramática es digna de mención, además de las mencionadas, Egilona (1845), Saúl (1849), Los errores del corazón (1852), El aventurero (1853), La Sonnambula (1854) y Baltasar (1858).

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Gertrudis Gómez de Avellaneda

Getrudis Gómez de Avellaneda es también conocida por su traducciones y reinterpretaciones de poemas de autores como Victor Hugo, Lamartine y Parny.

Lista de obras

Novelas

• Sab (1841)
• Dos mujeres (1842-43).
• Espatolino, La Prensa, La Habana (1844).
• Egilona, Imp. de José Repullés, Madrid (1845).
• Guatimozín, último emperador de Méjico, Imp. de A. Espinosa, Madrid (1846).
• Dolores, Imp. de V.G. Torres, Madrid, (1851).
• La mano de Dios (1853).
• La flor del ángel (tradición guipuzcoana) (1857).
• El artista barquero, ó Los cuatro cinco de junio (1861).
• Una anécdota de la vida de Cortés (1871)
• La ondina del lago azul (1871)

Poesía

• Poesías (1840)

Teatro

• El Príncipe de Viana (1844).
• Saúl (1849).
• Flavio Recaredo (1851).
• Errores del corazón (1852).
• La verdad vence apariencias (1852).
• La hija de las flores; o, Todos están locos (1852).
• La Aventurera (1853).
• Oráculos de Talía, ó los Duendes en palacio (1855).
• Simpatía y antipatía (1855).
• La hija del rey René (1855).
• Baltasar (1858).
• Catilina (1867).
• Munio Alfonso (1869).
• Recaredo (1869).
• El millonario y la maleta (1870).
• Los tres amores (1858).
• Leoncia (1917).

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