Todos los tipos de personajes literarios: funciones y ejemplos
El personaje en la ficción
¿Qué es un personaje, cómo analizarlo y cuáles son los tipos de personaje principales?
El personaje es el centro de toda gran narración, sea un cuento o una novela, en estos géneros literarios se puede ver atractiva gama de tipos de personajes. Un personaje principal debe ser tridimensional y convincente; debe ser el tipo de personaje dinámico con el que los lectores y espectadores puedan pasar días sin aburrirse. Igualmente importantes son los personajes secundarios, desde los compinches hasta los intereses amorosos, pasando por las figuras paternas, los villanos y los antihéroes.
Hay tres formas de clasificar los tipos de personajes.
- Arquetipos: son descripciones amplias de los distintos tipos de personajes que pueblan la narrativa humana.
- Función: otra forma es agrupar a los personajes por el papel que desempeñan a lo largo de la historia.
- Calidad: consiste en agrupar a los personajes por su calidad, explicando la forma en que cambian o permanecen igual dentro de una narración.
Para escribir una historia, o para entenderla, es importante conocer todos los tipos de personajes que te encontrarás al leer una fábula, un cuento o una novela, incluso al ver una película u obra de teatro.
Por eso en este artículo encontrarás un análisis amplio del personaje en la literatura y los tipos y funciones que existen, así tú podrás saber cómo analizar los personajes de las novelas o cuentos que leas.
7 funciones de los personajes en las historias
Si clasificamos los tipos de personajes en función del papel que desempeñan en la narración, podemos distinguir siete variedades distintas: el protagonista, el antagonista, el interés amoroso, el confidente, los deuteragonistas, los personajes terciarios y el papel de aluminio.
- Protagonista: El personaje principal de la historia es el protagonista. Debe estar cuidadosamente elaborado con una historia de fondo lógica, una motivación personal y un arco de carácter en el transcurso de la historia. A menudo, la historia se cuenta desde su punto de vista. Desde una heroína como Katniss Everdeen en Los Juegos del hambre hasta un miserable como el Memorias del subsuelo de Doestoevsky, el protagonista es el personaje por el que más se interesa el público.
- Antagonista: El villano de la historia es el antagonista. Piensa en Lex Luthor, Lord Voldemort o el Dr. Charles Nichols en El fugitivo. Ten en cuenta que un antagonista no es lo mismo que un antihéroe como el Joker o Walter White. Los antihéroes son villanos que funcionan en el papel de un protagonista.
- Interés amoroso: El interés amoroso es el objeto de deseo del protagonista. Un buen interés amoroso será convincente y tridimensional, como Daisy Buchanan en El gran Gatsby de Scott Fitzgerald o Rhett Butler en Lo que el viento se llevó.
- El confidente: Este tipo de personaje es el mejor amigo o compinche del protagonista, el Sancho Panza de su Don Quijote. A menudo, el objetivo del protagonista pasa por el confidente, aunque no todas las historias necesitan uno. Un confidente especialmente famoso es Horacio en Hamlet de Shakespeare, así como Hermione en Harry Potter.
- Deuteragonistas: Estos personajes suelen coincidir con los confidentes. Un deuteragonista está cerca del personaje principal, pero la trama principal de la historia no se corresponde directamente con su propio arco argumental. Horacio hace las veces de deuteragonista. En la trilogía de El Señor de los anillos de Tolkien, Samwise Gamgee es un deuteragonista. En Romeo y Julieta de Shakespeare, Benvolio es un deuteragonista que hace las veces de confidente, mientras que Mercutio es un deuteragonista pero no un confidente.
- Personajes terciarios: Los personajes terciarios pueblan el mundo de la historia, pero no están necesariamente vinculados al argumento principal. Estos personajes secundarios cumplen cualquier tipo de función y pueden tener diversos grados de dinamismo personal. Piensa en Padma y Parvati Patil en la serie de Harry Potter o en el padre Zosima en Los hermanos Karamazov. En Spider-Man, varios personajes terciarios ayudan a rellenar el mundo de la Nueva York de Peter Parker.
- Papel de aluminio: Un personaje secundario sirve principalmente para resaltar las cualidades del protagonista. Esto se debe a que el personaje secundario es el opuesto del protagonista. En la serie Star Trek, el Capitán Kirk y el Sr. Spock sirven de complemento mutuo, ya que sus personalidades son muy diferentes. Draco Malfoy es el enemigo de Harry Potter.
5 tipos de personajes y ejemplos en ficción
Una forma de clasificar a los personajes es examinar cómo cambian (o no cambian) a lo largo de una historia. Agrupados de esta manera por el desarrollo del personaje, los tipos de personajes incluyen el personaje dinámico, el personaje redondo, el personaje estático, el personaje de reserva y el personaje simbólico.
- Personaje dinámico: Un personaje dinámico es aquel que cambia a lo largo de la historia. Como tal, un personaje dinámico es el mejor protagonista. En Las aventuras de Huckleberry Finn de Mark Twain, tanto Huck como Jim son personajes dinámicos. Del mismo modo, cada uno de los personajes del triángulo amoroso de La decisión de Sophie, de William Styron -Stingo, Sophie y Nathan- es un personaje dinámico.
- Personaje redondo: Estrechamente relacionado con un personaje dinámico, un personaje redondo es un personaje importante que muestra fluidez y capacidad de cambio desde el momento en que lo conocemos. Por el contrario, algunos protagonistas dinámicos no cambian hasta que las acciones de la historia les obligan a hacerlo. Los personajes redondos pueden ser nobles, como Konstantin Levin en Anna Karenina de Lev Tolstói, o moralmente dudosos, como Humbert Humbert en Lolita.
- Personaje estático: Un personaje estático no cambia notablemente a lo largo de la historia. A veces se les conoce como personajes planos, y suelen desempeñar papeles terciarios en una narración (piense en varias figuras paternas en los libros infantiles de Roald Dahl). Muchos villanos también son estáticos: fueron malos ayer, serán malos hoy y serán malos mañana.
- Personaje de serie: Un personaje común es un personaje arquetípico con un conjunto fijo de rasgos de personalidad. Los diversos tontos de Shakespeare son personajes de serie, al igual que algunas de sus creaciones cómicas, como Sir Andrew y Sir Toby en Noche de Reyes.
- Personaje simbólico: Un personaje simbólico representa un concepto o tema más amplio que él mismo. Pueden tener cualidades dinámicas, pero también existen para orientar sutilmente la mente del público hacia conceptos más amplios. La mayoría son personajes secundarios, pero algunas historias tienen protagonistas simbólicos, como El idiota de Dostoievski. En cuanto a los personajes secundarios simbólicos, Boo Radley de Matar a un ruiseñor de Harper Lee es un ejemplo, ya que representa a una legión mucho más amplia de marginados.
12 Arquetipos de personajes literarios
Los personajes de una obra de ficción suelen agruparse en arquetipos. Estos arquetipos han sido clasificados por el psicólogo suizo Carl Jung, el teórico literario estadounidense Joseph Campbell y generaciones de autores, guionistas y narradores. Estos son los 12 arquetipos de personajes más comunes:
- El enamorado: el protagonista romántico que se guía por el corazón. Sus puntos fuertes son el humanismo, la pasión y la convicción. Sus puntos débiles son la ingenuidad y la irracionalidad. Algunos amantes famosos son Romeo, Julieta y Scarlett O’Hara.
- El héroe: el protagonista que se levanta para hacer frente a un desafío y salva el día. Sus puntos fuertes son el valor, la perseverancia y el honor. Sus puntos débiles son el exceso de confianza y la arrogancia. Algunos héroes famosos son Aquiles, Luke Skywalker y Wonder Woman.
- El mago: una figura poderosa que ha aprovechado los caminos del universo para lograr sus objetivos. Sus puntos fuertes pueden ser la omnisciencia, la omnipotencia y la disciplina, mientras que sus debilidades se centran en la corruptibilidad y la arrogancia. Próspero, Gandalf, Morfeo y Dumbledore son personajes mágicos famosos.
- El forajido: el rebelde que no acata las exigencias de la sociedad. El forajido puede ser un tipo malo, pero no siempre. Los puntos fuertes del forajido incluyen el pensamiento independiente y el escepticismo. Sus puntos débiles pueden ser la implicación y la criminalidad. Entre los forajidos famosos están Han Solo, Dean Moriarty y Humbert Humbert.
- El explorador: un personaje impulsado de forma natural a superar los límites y a encontrar lo siguiente. Sus puntos fuertes: son curiosos, impulsados y motivados por la superación personal. Sus puntos débiles son que son inquietos, poco fiables y nunca están satisfechos. Entre los exploradores famosos se encuentran Odiseo, Sal Paradise y Huckleberry Finn.
- El sabio: una figura sabia con conocimientos para los que preguntan. Los puntos fuertes del sabio son la sabiduría, la experiencia y la perspicacia. En cuanto a los puntos débiles, el sabio puede ser excesivamente cauto y vacilar a la hora de entrar en acción. Algunos sabios famosos: Atenea, Obi-Wan Kenobi y Hannibal Lecter (un sabio malvado).
- El inocente: un personaje moralmente puro, a menudo un niño, cuyas únicas intenciones son buenas. Sus puntos fuertes van desde la moralidad hasta la bondad y la sinceridad. Sus puntos débiles empiezan por ser vulnerables, ingenuos y mínimamente hábiles. Los inocentes famosos son el pequeño Tim, Lennie Small, Cio-Cio-San.
- El Creador: un visionario motivado que crea arte o estructuras durante la narración. Sus puntos fuertes son la creatividad, la fuerza de voluntad y la convicción. Sus puntos débiles son la implicación, el pensamiento único y la falta de habilidades prácticas. Entre los creadores famosos se encuentran Zeus, el Dr. Emmett Brown y el Dr. Moreau.
- El gobernante: un personaje con poder legal o emocional sobre otros. Los puntos fuertes del gobernante son la omnipotencia, el estatus y los recursos. Sus puntos débiles son la distanciación, la antipatía de los demás y el parecer siempre fuera de lugar. Algunos gobernantes famosos son Creonte, el rey Lear y la tía Sally de Huck Finn.
- El cuidador: un personaje que apoya continuamente a los demás y se sacrifica por ellos. Entre sus puntos fuertes, los cuidadores son honorables, desinteresados y leales. Entre sus debilidades, carecen de ambición personal o de liderazgo. A veces incluso carecen de autoestima. Entre los cuidadores famosos se encuentran Dolly Oblonsky, Calpurnia y Samwell Tarly.
- El hombre de siempre: un personaje relatable que se siente reconocible en la vida cotidiana. En cuanto a sus puntos fuertes, tienen los pies en la tierra, son sencillos y se pueden relacionar con ellos. En cuanto a los puntos débiles, suelen carecer de poderes especiales y no suelen estar preparados para lo que se avecina. Personajes famosos: Bilbo Bolsón, Leopold Bloom, Leslie Knope.
- El bufón: un personaje intencionadamente divertido que proporciona alivio cómico pero que también puede decir verdades importantes. Sus puntos fuertes son la capacidad de ser divertido, desarmante y perspicaz. Sus puntos débiles son la capacidad de ser odioso y superficial. Los bufones famosos van desde Sir John Falstaff hasta el Tonto del Rey Lear y los padres de George en Seinfeld.